La inteligencia artificial ha llegado para quedarse. La tecnología avanza sin control, sumergiéndose en todos los sectores sociales. Muchas empresas ya han incluido a la IA como un elemento más del organigrama y los centros de enseñanza no se quedan atrás. Algunos colegios han llegado a sustituir a profesores por la famosa inteligencia artificial y la normalización de su uso preocupa a la mayoría de docentes. Según informa C. Espinola, C. Villegas y M. Aguirregomezcorta en el video, la mayoría de alumnos ya usan la IA en clase. 

La inteligencia artificial toma protagonismo en pleno Día Internacional de la Educación. El Chat GPT y diversas herramientas de la IA se han instaurado en nuestro día a día de forma prácticamente inminente. La inteligencia artificial también se ha colado en las aulas. Un estudio de Empantallados y GAD3 ha revelado que el 82% de los alumnos utiliza la IA en clase. 

Solamente un 40% de los estudiantes utiliza la inteligencia artificial como fuente de información. La gran mayoría usa estas herramientas para mantener conversaciones exploratorias y un 91% de los alumnos han preguntado alguna vez algo a Chat GPT. 

Los estudiantes no son los únicos que han normalizado el uso de la tecnología en las aulas. Un 73% de los profesores confirma haber usado la inteligencia artificial en alguna ocasión. El 64% ha recurrido a ella para generar ideas para clases y el 50% para complementar contenidos de algunas materias.  

Sin embargo, no todos los profesores están de acuerdo con el uso de la IA en el ámbito educativo. El 67% de los docentes no lo recomiendan para hacer tareas y lo califican con una nota de 5’2, un suficiente. Los expertos recuerdan que los algoritmos de la IA no garantizan una educación inclusiva y puede llegar a interrumpir en el desarrollo de algunas habilidades de aprendizaje. 

Ante la proliferación de este tipo de herramientas, es esencial saber utilizarlas de manera saludable, ya que “un uso no mediado por profesores, conduce a resultados muy pobres”, tal y como apunta José María Cáceres, profesor del Instituto Encuentro. “Primero los alumnos tienen que aprender tecnológicamente cómo funciona la inteligencia artificial, pero luego también tienen que aprender los aspectos éticos”, explica la directora de Escola L’Horitzó, Anna Valero. 

Solo el 10% de las escuelas supervisan oficialmente el uso de la inteligencia artificial en clase, una cifra extremadamente baja para lo normalizado que está su uso y el posible impacto que puede tener en los más jóvenes. Neuropsicólogos como Beatriz González recuerdan que la IA puede ser muy útil a la hora de “relacionar conceptos, aprender sobre diferentes pintores de una época, qué técnicas utilizaban”, pero “no todo lo que nos dice la inteligencia artificial es real” y es importante tener conocimiento sobre las consecuencias que puede tener su uso en los centros escolares. 

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