Desde siempre, las plantas han sido utilizadas como alimento y también como remedio para muchas enfermedades. Sin embargo, el que sean naturales no quiere decir que sean totalmente inocuas para el ser humano. A lo largo de la historia, el ser humano ha ido descubriendo, a veces, no de la mejor manera, que muchas plantas pueden resultar tóxicas o incluso mortales para nosotros.

Lo curioso es que muchas de las plantas más mortíferas para el ser humano, y para cualquier especie, se ocultan tras bellas y llamativas flores, sin embargo, otras contienen en algunas de sus partes propiedades casi milagrosas. Por eso, no hay que guiarse por las apariencias, ya que ciertas plantas pueden engañar a su víctima.

El desarrollo de la toxicidad en algunas plantas es el resultado de una necesidad extrema de defenderse del mundo exterior. La evolución ha hecho que algunos animales, sobre todo los herbívoros que pueden estar más expuestos a estos peligros, sean completamente capaces de detectar y diferenciar aquellas plantas que pueden o no ingerir e incluso, detectar qué vegetales van a ayudar a depurar su organismo en caso de alguna intoxicación accidental.

Por otro lado, hay que tener en cuenta que las toxinas de estas plantas no van a afectar por igual a todas las especies. Algunas, pueden afectar solo a ciertos mamíferos, otras pueden afectar de igual forma a animales que a humanos. Y también, hay ciertos casos en los que algunas plantas son venenosas solo una parte de su vida, por lo que no suponen una amenaza constante.

Lo cierto es que existe una lista bastante grande de especies de plantas venenosas, pero, a continuación, vamos a hablar de las más peligrosas del mundo.

También conocida como la manzanilla de la muerte, es un árbol originario de Mesoamérica y de las islas del Mar Caribe. Alcanza los 20 metros de altura, y es extremadamente tóxico. Su fruto, el cual tiene un olor muy agradable, tiene un aspecto similar a una manzana, por lo que puede provocar alguna confusión. Para los humanos es letal, y posiblemente para el resto de mamíferos también. Se le suele conocer como ‘el árbol más peligroso del mundo’.

El efecto que provoca esta toxina son unos vómitos fuertes y una diarrea interminable que pueden provocar la muerte por deshidratación.

Esta planta también es conocida como laurel de flor o trinitaria. Se la suele encontrar en forma de arbusto, con hojas de color verde intenso. Esta planta de origen mediterráneo y también, resistente a las sequías, contiene toxinas venenosas en todas sus partes: hojas, flores, tallos, ramas e incluso, semillas. Es conocida como ‘la planta más venenosa del mundo’.

Una ingesta accidental de esta planta puede provocar náuseas, vómitos, vértigo, deposiciones, excitación y depresión, convulsiones, arritmias, taquicardias y finalmente, puede provocar a esa persona una parada cardiaca.

Esta planta ha causado estragos a lo largo de la historia, pero un hecho curioso fue que durante la Guerra de Independencia Española, en 1808, un pelotón de soldados de Napoleón se detuvo para cocinar carne. Y para el fuego emplearon estacas de adelfas, que se encontraban alrededor de su asentamiento temporal. El uso de estas estacas provocó la muerte de 8 soldados y la intoxicación grave de 4 más.

Es también conocida como matalobos o casco del diablo. Es una planta herbácea que se suele encontrar en las zonas montañosas del hemisferio norte. Se la considera la más tóxica de Europa. y entre sus toxinas se encuentra la aconitina, uno de los alcaloides más activos y tóxicos. Con un ligero contacto, puede hacer que el corazón se ralentice tanto hasta su muerte.

Es tan letal que tan solo 1 mg de esta planta es capaz de matar a una persona adulta de alrededor de 80 kilos.

Este es un bonito arbusto que es originario de Europa, el norte de África y el oeste de Asia. Es una de las plantas más venenosas del mundo y también de las más conocidas, ya que, desde el antiguo Egipto, ya se tenía conocimiento de sus efectos en las personas.

Una dosis baja de Belladona puede provocar delirios y alucinaciones, mientras que una ingesta de 10 a 20 bayas es suficiente para que la persona que lo ingiera fallezca.

Es una especie de liana trepadora, y es originaria de India e Indochina. Puede alcanzar los 5 metros de longitud. Sus flores se agrupan formando racimos de color rosa o púrpura rojizo. Lo que hace tan peligrosa a esta planta es la toxina que contiene, la abrina. Ésta tiene la capacidad de impedir la síntesis de proteínas con una velocidad abrumadora.

Con solo 3 mg de esta toxina se podría matar a una persona. Curiosamente, toda la planta es tóxica, y en la antigüedad esta planta era utilizada como método abortivo y también, para eliminar parásitos intestinales.