Estos son los alimentos que previenen el cáncer de vejiga según un estudio
Varios estudios han demostrado que unos buenos hábitos alimenticios son esenciales para reducir el riesgo de padecer cáncer de vejiga
Introducir en la dieta alimentos con capacidades antioxidantes y beber mucha agua ayudan de forma preventiva
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El cáncer de vejiga es una enfermedad que afecta a miles de personas cada año. Esta enfermedad suele ser más común en hombres y personas mayores de 55 años. Existen varios factores de riesgo asociados como pueden ser el tabaquismo o la exposición a químicos. A pesar de esto, se ha demostrado que los hábitos alimenticios desempeñan un papel importante en la prevención de este tipo de cáncer.
Frutas y verduras
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Un reciente estudio publicado en “European Journal of Nutrition” afirma que una dieta rica en vegetales como frutas y verduras podría proteger contra el cáncer de vejiga reduciendo el riesgo de padecerlo en un 20%.
Las frutas y verduras son ricas en antioxidantes, éstos son los encargados de combatir los radicales libres que provocan el daño celular, siendo esta la causa de mutaciones que pueden conducir al desarrollo de cáncer.
Verduras como pueden ser el brócoli, la coliflor, la col rizada o el repollo tienen propiedades anticancerígenas según varios estudios realizados. Según estas investigaciones, el consumo regular de estas verduras puede reducir considerablemente el riesgo de desarrollar cáncer de vejiga.
Las frutas cítricas como naranjas, limones, mandarinas o pomelos son muy ricas en vitamina C, un antioxidante muy potente que fortalece el sistema inmunológico. Varios estudios también han demostrado que las personas que consumen este tipo de fruta tienen un menor riesgo de padecer cáncer, ya que estos antioxidantes tienen la capacidad de proteger al ADN de las células frente al daño oxidativo.
Por otro lado, las espinacas, el kale y otras hojas verdes contienen luteína y zeaxantina, que son carotenoides que actúan también como antioxidantes en el cuerpo. Además, al ser ricos en fibra ayudan al cuerpo a eliminar las toxinas del organismo.
Té verde
Esta bebida milenaria ha sido muy estudiada por sus efectos para la salud. Entre sus propiedades se encuentran las catequinas, un tipo de antioxidante que puede prevenir el crecimiento de células cancerígenas. Un estudio encontró una relación positiva entre el consumo regular de té verde y la disminución en el riesgo de cáncer de vejiga, sobre todo en etapas tempranas de la enfermedad.
Lo ideal para poder obtener sus beneficios es consumir de una a tres tazas al día de este té, optando siempre por las variedades de té natural y evitando usar opciones azucaradas o procesadas para endulzarlo.
Frutos secos
Otros alimentos que son una fuente concentrada de antioxidantes, grasas saludables y fibra son los frutos secos. Las nueces o las almendras, también las semillas de chía y lino, tienen propiedades que ayudan a reducir el riesgo de padecer cáncer, y además también ayudan a mejorar la salud cardiovascular y metabólica.
Las nueces contienen polifenoles, compuestos bioactivos que tienen propiedades antiinflamatorias y anticancerígenas. Por otro lado, las semillas de lino aportan lignanos, que son fitoquímicos que pueden regular el equilibrio hormonal y proteger las células frente al desarrollo de tumores.
Tomates
El licopeno es un antioxidante que está presente en los tomates, también se puede encontrar en otras frutas rojas como la sandía. Hay múltiples estudios relacionados con este compuesto, y se ha demostrado su capacidad para reducir el riesgo de varios tipos de cáncer.
Este antioxidante tiene más capacidad de ser correctamente absorbido por el cuerpo cuando los tomates se consumen cocidos como puede ser en salsas, sopas o guisos.
Ajo y cebolla
El ajo y la cebolla tan presentes en la cocina mediterránea tienen compuestos organosulfurados, éstos tienen también un efecto anticancerígeno, pero también antiaterosclerosis, antitrombótico, antiinflamatorio y antimicrobiano, además poseen una elevada actividad antioxidante. Básicamente lo que hacen es activar unas enzimas en el hígado que son las encargadas de ayudar a eliminar sustancias tóxicas que puedan causar daño celular.
Por otro lado, varios estudios epidemiológicos han demostrado que un alto consumo de ajo y cebolla está asociado con un menor riesgo de padecer cáncer de vejiga. Por ello, se recomienda incluirlos en preparaciones diarias como guisos, sofritos, aderezos o marinados.
Cereales integrales
Los cereales integrales como pueden ser avena, arroz integral, quinoa o el pan integral son muy ricos en fibra dietética. Ésta ayuda a mantener un sistema digestivo sano, eso es fundamental para una buena eliminación de toxinas y compuestos carcinógenos.
También hay que tener en cuenta que los cereales integrales son una fuente de vitaminas del grupo B. Éstas contribuyen a la reparación celular y al metabolismo energético. Con una simple sustitución de alimentos refinados por opciones integrales se puede conseguir una dieta más saludable.
Consumir agua es esencial
El agua es esencial por muchos motivos, pero en el caso de la prevención del cáncer de vejiga tiene aún más importancia. Ya que beber suficiente agua diluye la orina y, por tanto, se reduce la concentración de sustancias potencialmente dañinas que pueden irritar el revestimiento de la vejiga. En cuanto a la cantidad de agua recomendada, varía dependiendo de la persona, pero una orientación general serían unos dos litros de agua al día.