Comprar un coche es una decisión muy importante en la que hay implicados múltiples matices más allá del lógico desembolso económico. Sin embargo, a pesar de la ilusión con la que suele afrontarse esta situación, en algunos casos, el comprador puede llegar a encontrarse con situaciones que le hagan valorar la devolución del vehículo tras la adquisición.
Por eso es totalmente lícito y necesario plantearse aquello de “¿Se puede devolver un coche después de haberlo comprado? La respuesta depende de múltiples factores legales, contractuales y específicos de la transacción. Repasamos los derechos y obligaciones que asisten al comprador en España en el marco de la compraventa de vehículos.
Aunque la ley no obliga a los concesionarios a aceptar devoluciones en compras presenciales, algunas marcas ofrecen políticas de satisfacción que permiten la devolución del vehículo dentro de un plazo específico, generalmente de 7 a 30 días. Estas políticas suelen estar sujetas a una serie de condiciones muy concretas, como que el coche no haya recorrido más de un número determinado de kilómetros o que no presente ningún tipo de daño.
También existen políticas comerciales específicas para ofrecer períodos de prueba o programas de recompra garantizada, en los que el cliente puede cambiar el vehículo por otro de la misma red si no está satisfecho.
En el sector de los vehículos de ocasión, se suelen permitir devoluciones si se detecta algún defecto importante no especificado al momento de la venta.
En el ámbito de las compras realizadas a distancia, como aquellas realizadas por internet o vía telefónica, la legislación española ofrece una protección especial al consumidor: el derecho de desistimiento. Este derecho permite al comprador cancelar el contrato sin necesidad de justificar su decisión y sin penalización alguna, siempre que lo haga dentro de un plazo de 14 días naturales desde la recepción del bien.
El derecho de desistimiento está regulado por el Real Decreto Legislativo 1/2007, Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios. Esta normativa busca proteger al comprador en transacciones en las que no ha tenido contacto directo con el producto antes de adquirirlo. Por lo tanto, si compras un coche de manera remota, puedes ejercer este derecho dentro del plazo establecido, siempre que no se trate de un producto personalizado o adaptado a tus especificaciones.
En las transacciones entre particulares, las reglas cambian de manera significativa. Aquí no se aplica el derecho de desistimiento, pero eso no implica que el comprador esté desprotegido. En estos casos, el Código Civil español ampara al comprador en situaciones de vicios ocultos. Estos son todos aquellos defectos graves que no eran evidentes en el momento de la compra y que afectan significativamente al uso del vehículo. Por ejemplo, problemas mecánicos importantes que el vendedor conocía pero no informó al comprador.
El plazo para interponer una reclamación por vicios ocultos es de seis meses desde la entrega del vehículo. Si se demuestra la existencia de estos defectos, el comprador puede exigir la resolución del contrato (es decir, devolver el coche y recuperar el dinero) o una rebaja en el precio.
Una de las protecciones más relevantes para el comprador es la garantía legal, que cubre tanto vehículos nuevos como de segunda mano. A partir del 1 de enero de 2022, la garantía mínima legal para productos nuevos en España se amplió a tres años. En el caso de los vehículos de segunda mano, la garantía debe ser pactada entre comprador y vendedor, pero nunca puede ser inferior a un año.
Dicha garantía legal protege al comprador frente a defectos que no sean atribuibles al desgaste normal del coche por su uso. Esto incluye problemas mecánicos, electrónicos o de seguridad que puedan surgir durante el período de garantía. En estos casos el vendedor está obligado a reparar el vehículo, sustituirlo, ofrecer una rebaja en el precio o aceptar la resolución del contrato si el defecto es grave y no puede ser reparado. El comprador debe informar al vendedor de cualquier problema en un plazo razonable desde que se detecta.
Devolver un coche tras su compra es posible, pero depende de múltiples factores como el tipo de transacción, las condiciones del contrato y el estado del vehículo. En compras a distancia, el derecho de desistimiento es una herramienta clave para proteger al consumidor. En la compraventa entre particulares, los vicios ocultos ofrecen una vía de reclamación, mientras que en concesionarios, la garantía legal y las políticas internas pueden proporcionar alternativas.
Para evitar conflictos y sorpresas desagradables, es muy importante siempre dedicar un tiempo razonable a leer detenidamente el contrato, conocer las políticas del vendedor y realizar una revisión exhaustiva del vehículo antes de firmar la compra definitiva.