Vivir con un hijo con un problema de salud mental: “Lo más duro del día a día es ver que pueden caer”

La salud mental últimamente está en boca de todos, y no es para menos. Los últimos datos sobre el suicidio y el exceso del consumo de fármacos dejan cifras preocupantes que hacen que la salud mental sea más reivindicada que nunca. Como se informa en el video, han sido varias las asociaciones que han querido aportar su granito de arena en el Día Mundial de la Salud Mental, tanto para los pacientes, como para quienes les acompañan en el proceso.

El suicidio se ha convertido en los últimos años en la primera causa de muerte entre jóvenes de 12 a 19 años. Solo en 2023, más de 4.000 personas se quitaron la vida, es decir, cerca de 11 personas al día. Antes del suicidio están los trastornos de salud mental, que presentan unas cifras abrumadoras en España. Parte de esta gran incidencia ha sido la consecuencia de la falta de psicólogos en la sanidad pública española.

La salud mental en la Seguridad Social se encuentra desbordada

España actualmente está muy por debajo de la media europea en número de profesionales de la salud mental: un 67% menos de psicólogos que en el resto de Europa. Según datos de ANPIR, en el país hay solamente seis psicólogos clínicos por cada 100.000 habitantes. Si lo comparamos con el resto de países europeos, España se queda a la cola: en Alemania hay 41 psicólogos por cada 100.000 personas, en Reino Unido 41, en Francia 15 e Italia 9. Por esta razón, la sanidad pública se encuentra totalmente desbordada. El CSIF estima que la lista de espera para una cita en el psicólogo de la Seguridad Social es de media de tres a cuatro meses.

Una de las consecuencias de este colapso es el excesivo consumo de fármacos. Estos se consumen sobre todo por ansiedad, insomnio y otros trastornos emocionales. España se ha colocado como segundo país en Europa que más antidepresivos y ansiolíticos consume, solo por detrás de Reiuno Unido. De media, en nuestro país de consumen 38 pastillas por habitante, en Reino Unido asciende a 56. Los datos son alarmantes, en particular entre los jóvenes. Según el Ministerio de Sanidad, el 19'6% de los adolescentes entre 14 y 18 años han consumido estos medicamentos alguna vez en su vida.

Los acompañantes del proceso de recuperación cuentan sus historias

En los procesos de recuperación de trastornos de salid mental, los padres y cuidadores se convierten en un factor fundamental. Por ello, el Ayuntamiento de Madrid, ha querido poner a disposición de muchos acompañantes una sala para que hablen sin tapujos de cómo están viviendo el proceso desde fuera. En la reunión, padres como Juanjo e Isidora han podido contar la historia de sus hijas, dos gemelas de 40 años que padecen esquizofrenia: "A la primera le dio el primer brote con 17 años" y "a los tres años", la segunda también somatizó el trastorno.

Muchos de los padres expresan en la sala que una de las mayores complicaciones que se presentan en el proceso es la negación de la enfermedad y la falta de aceptación. Aniano y Sara, padres de una mujer de 42 años que sufre un trastorno obsesivo compulsivo nos cuentan cómo han vivido esta negación: "Ella sistemáticamente no lo aceptaba (...) no tomaba su tratamiento". Gracias a la medicación, "le ha desaparecido la agresividad" y su hija muestra una evolución favorable.

Tanto los pacientes como los cuidadores reclaman iniciativas como las de estos talleres, ya que, como dice Isidora, "hoy en día nadie estamos libres de tener este tipo de enfermedad".

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