El futbolista Rafa Mir declara ante la jueza por una presunta agresión sexual por la que podría enfrentarse a 15 años de cárcel. Los médicos encontraron hematomas en uno de los brazos de la denunciante. La defensa del jugador asegura que son el resultado de un juego previo en la piscina y ella mantiene que son el rastro de una violación.
Tal y como ha podido comprobar Noticias Cuatro, la herida fue reflejada por los médicos en la exploración que se incluye en la denuncia de la Guardia Civil. La denunciante asegura que los hematomas se los hizo cuando la obligó a entrar por fuerza en una de las habitaciones de la casa.
El futbolista del Valencia CF, Rafa Mir, afirma ante la jueza que los hematomas de la joven son el resultado de un juego para tirar a la víctima a la piscina. Tanto él como el otro hombre, que fueron detenidos por presuntamente agredir sexualmente a dos mujeres, están en libertad provisional. La denunciante subraya que momentos antes de la violación, hubo otra agresión previa del futbolista. Justo después, ella llamó a un familiar para que fuese a por ella. La investigación muestra que la llamada se produjo tal y como dice.
El futbolista sostiene que los hematomas fueron de unos juegos, que las cámaras de seguridad estaban desactivadas y que el único altercado fue el que ocurrió cuando un amigo echó a la denunciante de forma agresiva. Ahora, queda por ver el testimonio de dos personas: el del taxista y el de un tercer hombre, amigo de Rafa Mir, que estuvo aquel día en esa casa.
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