Día Internacional Libre de Bolsas Plástico: quedan en la naturaleza más de 50 años y muchas acaban en nuestro organismo

Este miércoles 3 de julio se celebra el Día Internacional Libre de Bolsas de Plástico con el objetivo de reducir estas bolsas de un solo uso que tanto daño hacen al medio ambiente. Este día pretende concienciar del problema que supone la acumulación de estos materiales que suelen acabar en el mar. Las bolsas de tela son la mejor alternativa.

Para hacerse a la idea de cómo contaminan las bolsas de plástico tenemos el ejemplo de una ballena que apareció muerta en una playa de Hawái. Tras hacerle la autopsia descubrieron que tenían dentro una cantidad ingente de basura y, entre otras cosas, varias bolsas de plástico.

Según explica Julio Barea, responsable de plásticos de Greenpeace, “prácticamente todas las especies marinas han ingerido restos de plásticos o de microplásticos”.

Para evitar estas cosas se creó este Día Mundial sin Bolsas de Plástico, un producto que contamina nuestros mares y que todavía vemos en la calle por todas partes.

En algunos comercios ya están dando pasos para evitar su uso y ya son muchas las tiendas que están concienciadas con el problema.

Lo mejor siempre es la bolsa de tela, evitando otras alternativas que pueden ser igual de contaminantes que los plásticos. “Biodegradables, biocompostables, todo ese tipo de apellidos bio que les han puesto pero que realmente siguen siendo bolsas que contienen plásticos”, asegura Barea.

Las bolsas de plástico las usamos unos minutos, pero quedan en la naturaleza más de 50 años y muchas de ellas acaban en nuestro organismo. “Ya se han detectado en heces, en nuestros riñones, en los pulmones, en el plasma sanguíneo”, explica el experto de Greenpeace.

Usamos 144 bolsas por persona al año, pero desde que pagamos por ellas, son cada vez menos. “El objetivo de la ley”, según explica Julio Barea, “es reducirlo por debajo de 100 bolsas por habitantes al año”.

Pero, el objetivo final es que deje de existir este día y para ello, tenemos que volver a comprar como antes, “como hacían nuestros padres, nuestras madres, nuestros abuelos o nuestras abuelas, que es llevar la bolsa desde tu casa” para que este invento sueco de hace 60 años acabe desapareciendo.