El homenaje de Marta a sus abuelos: recorrió 100 kilómetros para sorprenderlos tras su graduación
Marta acudió a recoger su banda como maestra de Educación Infantil en Ourense
Marta decidió no ir a la cena de su graduación para acudir al hospital donde estaban sus abuelos
El vídeo de la sorpresa se ha hecho viral y hoy su historia es portada de un periódico
Marta se graduó como maestra de Educación Infantil en Ourense, pero entre el público faltaban dos personas especiales para ella: sus abuelos. Ellos estaban en el hospital y no pudieron acudir a la ceremonia. Ella, con la banda todavía puesta, no lo dudó ni un segundo y recorrió 100 kilómetros para encontrarse con ellos en una fecha tan importante para ella, según informa Laura Queijeiro y Sara García.
“Ay, Dios mío”, fueron las primeras palabras de su abuela, quien no se podía creer que su nieta estuviese allí. “Qué guapa, eh”, afirmó su abuelo con emoción. “Terminé el acto, les llamé para saber qué tal estaban y les dije que me iba a quedar a la cena de la graduación”, reconoce Marta. Aunque no lo hizo. Prefirió desplazarse 100 kilómetros de Ourense a Vigo para darles un abrazo.
MÁS
Un herido en el desalojo de la acampada propalestina en la Universidad de Sevilla
La madre de Gabriel Cruz logra paralizar el documental sobre su hijo: "La violencia no puede ser morbo y espectáculo"
La historia de Asier y los Guerreros Púrpura: la asociación que brinda a niños con discapacidad unas vacaciones en familia
“Intenté mantener las ganas de llorar pero fue imposible”, confiesa Marta
La graduación es uno de esos instantes que nunca se olvidan. Así fue para Marta también, quien acudió para recoger su banda como maestra de Educación Infantil en Ourense. En traje y en tacones, decidió no ir la cena de su graduación para acudir al hospital donde estaban sus abuelos. “Intenté mantener las ganas de llorar, pero fue imposible porque al final fue un orgullo para mí graduarme y poder contárselo. Para mí fue increíble”, dice la joven.
El vídeo de la sorpresa se ha hecho viral y hoy su historia es portada de un periódico. “Yo ya le dije que ha liado una buena”, sostiene su abuelo. “Soy quien soy, hoy en día, gracias a ellos. Si te crías con ellos tienes unos valores y una forma de ver la vida muy distinta de si no tienes la oportunidad”, apunta Marta. Y es que esta futura profesora no es capaz de separarse de las dos personas fundamentales en su vida: sus abuelos.