Llega una nueva polémica en Valencia tras comprobar que la Consejería de Educación da un punto en la escolarización del niño en función de su procedencia, religión o que sus padres tengan empleo. La Confederación Gonzalo Anaya lleva ante el Síndic de Greuges las posibles “discriminaciones” en los criterios de baremación, según informa Paloma Gómez. "Esto ha dejado a las familias de rentas bajas igual que estaban", sostiene Rubén Pacheco, presidente de Federación de Asociaciones de Padres i Madres de Alumnos Provincia de Valencia (FAMPA).
Ir a la parroquia, haber nacido en la Comunidad Valenciana o que los padres del alumno tengan trabajo son aspectos que en Valencia te dan más puntuación a la hora de escolarizar a los niños. El conseller José Antonio Rovira defiende que la circunstancia específica “solo supone un punto en la admisión y que los centros pueden aplicarla o no".
El Gobierno del Partido Popular y Vox realiza cambios en el sistema educativo pese a que la Ley Educativa está en tramitación en las Cortes Valencianas. Algunos de los criterios que se presentan en Valencia para sumar puntos en el acceso a la escolarización son discriminatorios. Así lo denuncian la Confederación de Asociaciones de Madres y Padres 'Gonzalo Anaya' que han llevado la petición al Síndic de Greuges. Si la administración pública no reacciona llegarán a la Fiscalía.
"Estos puntos corroboran que el concepto de libertad del PP y Vox es la discriminación", afirma Inma Coret, miembro del sindicato Sindicat de treballadors i treballadores de l'ensenyament del País Valencià (STEPV). El empleo de los padres, haber nacido en la Comunidad Valenciana y la religión pueden suponer un punto clave a la hora de escolarizar a los más pequeños. En esta última circunstancia, los padres tienen que presentar un certificado que debe expedir el párroco de la localidad. Desde la Consellería de Educación, defienden que la circunstancia específica solo supone un punto mientras que las rentas bajas, las familias numerosas o monoparentales tienen siete.