El lado más humano de las redes sociales: así combaten la soledad mujeres latinas en Madrid

  • 'Amigas del alma' es una comunidad de mujeres emigrantes que quedan a través de las redes sociales

  • Stefy Figueroa, de origen ecuatoriano, creó esta comunidad cuando dejó su país para venir a vivir a Madrid

  • Ahora más de 750 mujeres de distintas nacionalidades combate la soledad con risas y compartiendo inquietudes

Aunque casi siempre ponemos el foco en lo negativo de las redes sociales, estas también tienen su lado positivo. Según informa Marta Lilao en el vídeo, así lo demuestra la historia de un grupo de mujeres que, gracias a las redes, se han hecho de amigas del alma y cada vez son más.

La idea surgió en las redes sociales, una chica ecuatoriana, Stefy Figueroa, decidió contar cómo se sentía después de haber tenido que dejar su país para venirse a España. Así nació esta comunidad de mujeres, la mayoría de origen latinoamericano, que organizan quedadas para combatir la soledad.

‘Amigas del alma”, así se llama esta comunidad de mujeres que ha ido creciendo poco a poco. Ahora ya son 750, la mayoría de origen latinoamericano. Quedan a través de las redes sociales para esquivar la soledad de grandes ciudades como Madrid.

Esta iniciativa comienza con la historia personal de Stefy, una chica que dejó ecuador para emigrar. “Cuando llegué a vivir a Madrid”, nos cuenta, “llegué a sentir que quizá, eso que yo tenía en mi país, mi familia, mis amigos, mi zona de confort, lo había perdido”.

Decidió contar cómo se sentía a través de las redes sociales, “cuando tienes una edad más adulta se vuelve más complejo poder integrarte y fue así como lo conté”. Lo que no se esperaba era una respuesta tan acogedora y se dio cuenta de que “efectivamente no estaba sola, había muchas mujeres al otro lado sintiendo lo mismo que yo”.

La comunidad que surgió de las redes sociales donde las desconocidas se convierten en amigas

Así, creó esta gran comunidad de mujeres como ella, que emigraron de Latinoamérica, y que gracias a este grupo se sienten en familia. “Muchas personas creen que al venir a España quizá es más fácil porque hablamos el mismo idioma, pero en realidad el cambio cultural es brutal”.

Ahora son más de 750 mujeres, de distintas edades y diferentes nacionalidades, “están llegando chicas de España y de otros países de Europa”. Todas unidas en torno a actividades divertidas y útiles, “arte, movilidad, también hablamos de nutrición que es algo que afecta mucho también cuando emigras”.

Las risas de estas mujeres son la clave del encuentro y en este grupo las desconocidas se convierten en amigas, “conocí a muchas mujeres que hoy forman parte de mi círculo cero”. Para que el sentimiento de soledad de Stefy y de otras muchas chicas como ella nunca más esté presente.