Cuando se produce un accidente de tráfico la resolución del caso depende de los testigos y sobre todo de las pruebas para saber qué ha pasado en la colisión. Según informa en el vídeo Sandra Mir, el equipo de ‘Noticias Cuatro’ ha estado con dos expertos en reconstrucción de accidentes.

Los expertos muestran un ejemplo de cómo actúan en una colisión en una vía interurbana entre dos vehículos, utilizando para ellos las últimas tecnologías en reconstrucción de accidentes. Rodrigo Galán, ingeniero del Centro de Experimentación y Seguridad Vial MAPFRE (CESVIMAP), comenta que van a utilizar un láser escáner con una precisión muy elevado que mide en milímetros.

Con este láser mapean el golpe delantero y el trasero, para así llevarse el escenario actual hasta el ordenador, para analizarlo detalladamente. Daniel Vique, otro ingeniero del CESVIMAP, cuenta que tienen otro tipo de escáner que hace lo que el anterior, pero exclusivamente con los vehículos.

Jorge Jiménez, ingeniero del CEVISMAP, dice que conectan una especie de ‘caja negra’ para leer parámetros reales de lo que ha sucedido; como la velocidad, el giro del volante, el estado del freno y del acelerador. Una vez analizadas todas las partes de las distintas pruebas ofrecen un diagnóstico.

José Antonio Maurenza, director de Investigación de Accidentes de CESVIMAP, comenta que al escanear los vehículos se observa que uno de los vehículos tiene un golpe en la parte frontal, pero es muy bajo. Por ello, les parece que el coche se ha tenido que empotrar contra un camión y se ha introducido por debajo. Mientras que el otro vehículo iba por delante del camión y fue alcanzado por el mismo.

Concluyen que se trata de un alcance por adelantamiento, debido a que, al analizar la velocidad, se observa que el camión no se percata de que hay un vehículo parado, por lo que frena intensamente y el coche de atrás no mantiene la distancia de seguridad y es alcanzado por el camión. Si el coche hubiera ido a la misma velocidad, pero con la distancia segura, hubiera tenido tiempo de reacción.

El escaneado 3D consiste en una captura exhaustiva de la geometría espacial del lugar del accidente, para así crear unos ‘gemelos digitales’ precisos en tres dimensiones. Sirve para capturar detalles como la posición de los vehículos, las marcas en la vía, y otros elementos que pueden ser clave para construir una base sólida y analizarla.

La fotogrametría trata de definir precisamente la forma, las dimensiones y la posición espacial de los objetos implicados; mediante fotografías. Es similar al método anterior, pero transforma en mallas los puntos que se generan con el escaneado 3D. Con tan solo unas pocas fotografías se obtiene un análisis profundo y exacto.

Los Sistemas de Información Geográfica (GIS) sirven para que se puedan volcar los datos geográficos en los ‘gemelos digitales’, de manera que obtienen la información del incidente en tiempo real. Muestra la red de carreteras y los elementos situados en cada una, para así facilitar previsualizaciones y mediciones.