Los cuatro cuerpos encontrados en una vivienda situada en el casco histórico de Toledo corresponden a tres hombres y una mujer de entre 50 y 60 años. La investigación apunta a una intoxicación por monóxido de carbono. Uno de los vecinos señala que conocía a uno de ellos: “Se llamaba Marcos y era pareja de una de las víctimas”, según informa en el vídeo Marta Aguirregomezcorta.
Los médicos forenses encontraron a las cuatro personas metidas en la cama. Una pareja en una cama y los otros dos hombres repartidos en distintas habitaciones. Ninguno presentaba signos de violencia. La mujer ya estaba en avanzado estado de descomposición.
La Policía Nacional investiga la aparición de cuatro cadáveres en un domicilio del Casco Histórico de Toledo, en la Cuesta de Santa Leocadia. El hallazgo se ha producido después de que una vecina echase de menos a un amigo con el que no contactaba desde el viernes.
La principal hipótesis se centra en una intoxicación por monóxido de carbono. “Había una estufa de butano. No había mecha, pero la bombona estaba abierta”, explica Milagros Tolón, delegada del Gobierno. Las víctimas se encontraban en la planta baja de una casa que se alquilaba por habitaciones. “Es como si hubiesen metido a todos juntos en el piso y estuvieran ahí haciendo vida”, añade uno de los vecinos.
Tolón ha señalado que en una de las habitaciones había una estufa que, cuando entraron los agentes policiales a la vivienda, aún estaba con el interruptor de encendido accionado. Aunque no quedaba llama porque se había consumido el gas.
“Es susceptible que el gas butano traspasase de una a otra habitación”, indica el jefe Superior de Policía de Castilla-La Mancha, Javier Pérez Castillo. Aún así, ha señalado que se debe esperar para conocer los resultados de las autopsias que se practicarán este miércoles en el Instituto Anatómico Forense de Toledo y al avance de las investigaciones.