Ángela Sánchez es una profesora y madre de dos niños adolescentes. Ella ha presentado en el Congreso de los Diputados 80.000 firmas para conseguir una ley que prohíba el teléfono móvil, en menores de 16 años, durante las clases. “Hemos despertado un debate social”, afirma la docente.
Andalucía ha sido una de las primeras comunidades en prohibirlos en los centros educativos. Así, en un colegio de Granada aseguran que ahora están más tranquilos. “De hecho, si encontramos algún alumno con un móvil son sancionados”, explican desde el colegio. Han expulsado a más de 10 alumnos.
La docente Ángela Sánchez ha presentado 80.000 firmas en el Congreso de los Diputados en busca de la prohibición de los móviles en los centros educativos. “Esto indica que hay una gran preocupación social en cuanto a la telefonía móvil en los menores. Les cuesta concentrarse la comprensión lectora en Lengua y se extrapola a otras áreas como Matemáticas”, sostiene la profesora.
Este cambio ha empezado a notarse en los colegios andaluces, donde ya lo han implantado. “Hemos conseguido tranquilidad. El proyecto se llama ‘Respira’ y es justo eso lo que hemos conseguido. Ahora, atienden y hacen una vida normal”, destaca el centro educativo. Aquí, los estudiantes depositan su teléfono móvil en una caja y los dispositivos electrónicos quedan requisados hasta la salida. Muchos alumnos confiesan que al principio les costó un poco pero que ahora “se lo pasan bien con sus amigos”. Y es que dejar a un lado el móvil puede marcar la diferente en el aprendizaje.