España tiene un papel clave en el tráfico de cannabis por su posición estratégica en Europa. Y es que el país es el puerto de entrada de esta droga en Europa. Esta sustancia procede de África y luego se reparte hacia el resto del continente. ¿Cómo se hace? A través del canal de la Mancha, los Pirineos y la costa mediterránea. El operativo logístico que realizan desde las narcolanchas no deja indiferente a nadie.
Tres cuartas partes del cannabis incautado en toda la Unión Europea, se confisca en España. La mayoría de esta droga se transporta a través de barcos camufladas en contenedores. Nuestro país funciona como puerto y huerto, ya que parte de esas incautaciones se hacen en plantaciones.
El 70% de las incautaciones son de cannabis, la droga más consumida e incautada en el continente. El tráfico de esta sustancia se ha duplicado en la última década. Según el Informe Europeo sobre Drogas de la UE, en torno al 8% de los adultos europeos ha consumido cannabis en el último año.
En 2021, las cantidades de resina de cannabis (816 toneladas) y hierba de cannabis (256 toneladas) incautadas en la UE alcanzaron su nivel más alto en una década. En cuanto a la cocaína, en 2021 se confiscó una cantidad récord de 303 toneladas de esta droga por parte de los Estados miembros.
Las incautaciones de la cocaína son del 11%. Es decir, el tráfico de esta droga se ha multiplicado por más de cuatro en la última década. En este caso, la coca procede de Latinoamérica y África, tanto por mar como por aire.
Si nos centramos en las zonas donde más incautaciones se realiza, se encuentra el puerto de Amberes en Bélgica con 69 toneladas. Así, se convierte en la zona que más incauta. Le sigue Róterdam, en Países Bajos, con 42 toneladas. En España, siendo el tercer punto de entrada, están Algeciras, Vigo y Valencia con 18 toneladas.