Cory Booker, senador demócrata por Nueva Jersey, ha batido este martes el récord al discurso más largo pronunciado en el Senado de Estados Unidos. Un total de 25 horas y cuatro minutos es lo que ha durado la intervención del demócrata, un alegato en el que ha puesto sobre la palestra al presidente Trump. Según informa Ana Lorenzo en el video, el discurso del senador se ha centrado en denunciar las políticas del magnate, incluyendo la situación de los migrantes en el país. 

Con solo dos vasos de agua sobre su atril, Cory Booker ha desafiado los límites de su cuerpo pronunciando el discurso más largo de la historia del Senado de Estados Unidos. Sin comer, parar o ir al servicio, el senador se ha alargado 25 horas y cuatro minutos para criticar las políticas de Donald Trump, calificando su mandato como una amenaza “grave y urgente”.

El antiguo jugador de fútbol americano tomaba la palabra la tarde del lunes a las 19.00 horas y finalizaba a las 20.04 horas del martes. A las 19.19 horas batía el récord del senador de Carolina del Sur Strom Thurmond en 1957 para ponerse a la Ley de Derechos Civiles, pero al senador le quedaban algunos asuntos en el tintero que le hicieron prorrogarse casi una hora más. 

"Estoy aquí porque creo sinceramente que nuestro país está en crisis", aseguraba el demócrata al principio de su discurso. Desde el 20 de enero, cuando Donald Trump inició su mandato, el magnate "ha infligido mucho daño", según explicaba el senador. 

En su comparecencia, Cory Booker ha criticado las políticas del actual presidente de Estados Unidos afirmando que “estadounidenses de todos los orígenes están soportando dificultades innecesarias, e instituciones que son especiales en Estados Unidos, que son valiosas, que son únicas en nuestro país, están siendo afectadas, atacadas e incluso destruidas de manera imprudente, y yo diría incluso inconstitucional”. 

El senador ha tratado un abanico de temas variado y bastante polémico durante las 25 horas de su alegato: desde la guerra de Rusia y Ucrania hasta la desaparición de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional.  

Su discurso ha terminado con una gran ovación y con un broche final por parte del demócrata: "Este es un momento moral. No se trata de izquierda ni derecha; se trata de lo correcto o lo incorrecto. Vamos a meternos en un buen lío, amigo mío. Señora presidenta, cedo la palabra". 

Con esta extensa intervención, Cory Booker daba uno de los mejores ejemplos de filibusterismo, una herramienta de protesta que quedaba inmortalizada en la película de 1939, ‘Caballero sin espada’. En el filme, el personaje interpretado por James Stewart da un discurso de 23 horas hasta el desmayo contra la corrupción. 

No es la primera vez que se utiliza el filibusterismo en Estados Unidos. Ya en el mandato de Barack Obama, Ted Cruz hacía un alegato de 22 horas contra la reforma sanitaria del presidente. El arma del filibusterismo ha sido muy frecuentada sobre todo para retrasar votaciones. Con su discurso, Cory Booker consiguió retrasar la votación para eliminar los aranceles a las importaciones canadienses, una votación que estaba prevista para el martes. 

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