Las temperaturas gélidas no han impedido a los seguidores de Donald Trump estar a la intemperie todas las horas que haga falta para ver su investidura. Según informa Sara Canals y Lorelei Esteban, las calles se han llenado de colas kilométricas para seguir la ceremonia que muchos han calificado como "un momento histórico" con este nuevo Gobierno. Las grandes pantallas han retransmitido la ceremonia que ha tenido lugar en el interior del Capitolio, reservado solo para unos pocos afortunados.

Los selfies y las fotografías no han cesado para inmortalizar un momento histórico. En el acto, ha sonado el himno nacional interpretado por Christopher Macchio, amigo de Donald Trump. El único español invitado a la toma de posesión de Trump ha sido Santiago Abascal, aunque no ha sido captado por las cámaras institucionales.

No hay frío que congele el ánimo de los seguidores de Trump. Así le ha ocurrido a un joven ganadero, quien ha estado desde las 02:00 horas de la madrugada haciendo cola para tener un hueco en el pabellón deportivo. Unos han desafiado al frío y otros al protocolo, como el senador demócrata, John Fetterman, quien ha ido en pantalones cortos, sudadera y deportivas.

Una imagen muy distinta al glamour sobrio de Melania Trump, quien ha asistido con un sombrero que le tapaba parte de su rostro. En el palco familiar estaban sus hijos y su suegro, a quien ha saludado el magnate con un apretón de manos. A su mujer, Trump le ha dado casi un beso, ya que no llegó a serlo por culpa del sombrero.

Entre las personalidades que han asistido, ha destacado la presencia de Elon Musk, quien se ha convertido ya casi en uno más de la familia. Al igual que su vicepresidente J. D Vance junto a su esposa hindú, Usha Vance, y sus hijos. La familia ha estado ocupando un lugar clave en el corrillo de mandatarios tecnológicos, junto a Musk, Mark Zuckerberg de Meta, Jeff Bezos de Amazon -acompañado de su novia, Lauren Sánchez- o Sundar Pichai de Google. Entre los cuatro ejecutivos suman más capital que el Producto Interior Bruto español (PIB).

Un batallón de multimillonarios ha estado presentes en la jura de Trump, como Bernard Arnault, el apodado ‘dueño silencioso del lujo’ por ser el hombre más rico del mundo. El consejero delegado de ‘Louis Vuitton’, Pietro Beccari, también ha ido al acto junto a su mujer y su hija. Y tampoco han faltado los expresidentes con sus esposas, excepto Michelle Obama, una de las ausencias más importantes en la ceremonia. Aunque Barack Obama sí ha acudido junto a los Clinton, los Bush, Biden y Kamala Harris. Los mandatarios extranjeros, como Javier Milei o Giorgia Meloni, también han acudido a la investidura del 47º presidente de Estados Unidos.

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