Al menos 106 personas han muerto esta noche por un terremoto de magnitud 7,1 en el Tíbet. Ahora, se realiza el rescate a contrarreloj de posibles supervivientes. Las autoridades han confirmado que, después del seísmo principal, ha habido más de 50 réplicas con una magnitud máxima de 4,4.

A las 09:00 horas, un terremoto de 7,1 ha sacudido a la región del Tíbet y ha provocado el derrumbe de 1.000 viviendas en el condado de Tingri. Con una profundidad de apenas 10 kilómetros, las estructuras y los edificios han quedado destrozados. Las labores de rescate se han complicado por las 50 réplicas que se han producido.

La zona del Tíbet se ha visto sorprendida por un seísmo con una magnitud de 7,1 y una profundidad de 10 kilómetros. Tras el terremoto, ha habido más de 50 réplicas con una magnitud de 4,4. El pánico ha aumentado entre los vecinos que ya estaban en la calle viendo sus casas, vehículos y barrios enteros convertidos en escombros.

Al menos han muerto más de un centenar de personas y han encontrado más de 130 heridos, pero los números son provisionales y esperan que aumenten. Miles de casas de la región han sido destruidas y los edificios se han convertido en pilas de escombros donde los rescatistas buscan supervivientes. Aldeas enteras han acabado derruidas y las carreteras se han abierto a causa del gran seísmo.

Los equipos de bomberos han desplegado a más de 1.500 efectivos para llevar a cabo las tareas de búsqueda y rescate de supervivientes. El epicentro del seísmo se ha situado a unos 85 kilómetros del monte Everest, entre la frontera de China y Nepal. El terremoto se ha sentido en zonas de Nepal y en varios Estados del norte de la India.

Por toda la zona del Tíbet, en el sureste chino ha habido réplicas y ya se han enviado equipos y toneladas de ayuda a la zona. Muchos países y organizaciones internacionales han ofrecido su apoyo al Gobierno chino. Aunque se trata de una región remota con condiciones geográficas y climáticas que hacen complicada una respuesta coordinada y efectiva.

El presidente chino, Xi Jinping, pidió “esfuerzos exhaustivos para salvar vidas y minimizar el número de víctimas”. Así, destacó la necesidad de “prevenir desastres secundarios” y “reasentar de forma adecuada a los residentes afectados”. "Debemos fortalecer el monitoreo y la alerta temprana de terremotos, asignar materiales de rescate de emergencia de manera oportuna, reparar la infraestructura dañada lo antes posible, organizar los arreglos básicos de vivienda para la gente y garantizar un invierno seguro y cálido", ha añadido.

Tíbet y otras zonas del oeste de China son un escenario frecuente de terremotos, por la cercanía del punto de fricción de la placa tectónica asiática con la India. El condado de Tingri, el más afectado por el seísmo, está ubicado a los pies de la cordillera del Himalaya y tiene un altitud promedio de 5.000 metros sobre el nivel del mar. Según los pronósticos meteorológicos, está previsto que alcance temperaturas con un mínimo de 16 grados bajo cero y un máximo de tres grados durante el martes.

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