La candidata demócrata, Kamala Harris, ha arrollado a Donald Trump en el primer debate cara a cara celebrado en Filadelfia. Tras mostrarse tensa en su primera entrevista en solitario, Harris consiguió poner a su oponente a la defensiva. En los 90 minutos, Trump no dudó en lanzar algunas afirmaciones delirantes como que los inmigrantes se comen a las mascotas. Sus mentiras eran tan descabelladas que incluso los moderadores no dudaron en desmentirlas, lo que podría haber aumentado las posibilidades de ella, según informa Sara Canals y Ana Lorenzo.

Kamala Harris controló los 90 minutos del debate contra el expresidente de Estados Unidos. Desde el primer momento, puso las cartas sobre la mesa. “Claramente yo no soy Joe Biden y no soy Donald Trump”, advirtió la candidata que ofrece un nuevo liderazgo para EEUU. Ella le reprochó al empresario sus mentiras y ataques a la democracia con afiladas burlas y le señaló al candidato republicano que los líderes mundiales se ríen de él al igual que la gente, ya que "se aburren en sus mítines". Y él, descolocado por los ataques, utilizó la identidad racial como arma arrojadiza.

Una vez finalizado el debate, Donald Trump protagonizó un momento insólito: se dirigió directamente a la ‘Spin room’ -la sala donde está la prensa- para presentarse como una víctima. Empezó a responder preguntas aleatorias y aseguró que fue el mejor debate de su vida y que incluso la machacó, una imagen completamente distinta a la que se vio desde fuera. Así, sostuvo que él no necesita un segundo cara a cara para ganar la presidencia de la Casa Blanca.

El debate dejó momentos destacables que hemos analizado con el subdirector de Noticias Cuatro, José Luis Fuentecilla. El periodista destaca que todos los debates pasan a la historia por una frase o un momento clave y este no fue diferente. “Trump ha machacado de principio a final con lo mismo: EEUU sufre una invasión de inmigrantes criminales que están destruyendo el país. En su obsesión por sacudir con este asunto a su rival, Trump ha llegado al punto de acusarles de comerse a las mascotas, a los perros y gastos domésticos. Unas declaraciones que fueron corregidas por los propios moderadores.

En este primer cara a cara, el lenguaje corporal era clave. “Trump apenas movía una ceja, pero Kamala Harris era muy expresiva y ha sabido utilizar bien ese recurso para ridiculizarlo”, describe el subdirector de Noticias Cuatro. Las caras que ponía durante las intervenciones del magnate dejaron claro la intención de la demócrata. Y no era para menos. Trump soltó frases como que le iba a regalar uno de sus sombreros hasta que su padre era profesor del marxismo y que se lo inculcó muy bien. Pese a la derrota de Trump en el debate, esto no significa que vaya a costarle votos. “Ha desaprovechado oportunidades para que aquellos que están pensando en votar a Kamala dejen de hacerlo”, sostiene Fuentecillas.

“Su mejor argumento era que Kamala lleva tres años y medio en el Gobierno y que no se puede presentar como candidata del cambio. Lo ha dicho sí, pero de una manera clara solo al final”, añade. Lo que todavía no podemos saber es si la demócrata ha conseguido dar una imagen presidencial. “Es más subjetivo. Es lo que se preguntan los votantes indecisos que necesita la candidata demócrata, la milla extra para alzarse con la presidencia. A Trump ya lo conocen de sobra. Pero ¿Cómo es Kamala Harris? ¿Estaría tranquilo con ella de presidenta?”, concluye el subdirector de Noticias Cuatro.

Lo que sí se puede destacar es cómo la candidata desestabilizó a su adversario en un debate clave para las elecciones. El primer cara a cara de Donald Trump contra Kamala Harris fue una prueba de fuego para la no tan conocida candidata demócrata. Ella se acercó a su oponente para darle la mano antes de comenzar. "Kamala Harris, buen debate", dijo ella. “Me alegro de verte”, le respondió el magnate. Harris logró que Trump estuviese a la defensiva y que incluso no la mirase en los momentos en los que ella se dirigía a él. Salió tan ilesa del encuentro que estuvo riéndose y girando la cabeza con una gran soltura durante las intervenciones del magnate.

Trump insistió con su mensaje estrella: millones de migrantes criminales están llegando al país para destruirlo. La economía fue otro de los temas que acaparó el debate, con ambos culpándose de generar una situación desastrosa y con pocas medidas concretas. El aborto también fue otro punto de batalla, con una Kamala Harris combativa. La candidata le reprochó que no debería decirle a una mujer qué hacer con su cuerpo mientras el empresario acusaba a los demócratas de apoyar el infanticidio, una falsedad que fue corregida por la propia moderadora del debate en el medio ‘ABC’, Linsey David.

La encuesta de la CNN afirma que el 63% de los votantes registrados dan la victoria a la demócrata frente al 37% de Trump. ‘The Washignton Post’ ha preguntado a un grupo de votantes de los Estados clave en EEUU: de los 25 votantes, 23 le dan la victoria a la candidata demócrata. El ‘Financial Times’ ha citado a los mercados bursátiles que dan como vencedora a Harris, con un valor de nueve centavos por encima de Trump. Y es que hasta los analistas del ala más cercana a los republicanos se inclinaron por la victoria de la demócrata.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.