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Ir al trabajo en pijama es la nueva forma de reivindicación de muchos jóvenes chinos. Según informa Sandra Mir en Noticias Cuatro, protestan contra unas condiciones laborales precarias e inestables. Este movimiento de protesta se ha vuelto tendencia en las redes sociales. Se cuestionan las premisas tradicionales sobre la profesionalidad y la imagen personal.
Kendou S, es una joven China que decidió ir a un día a trabajar en pijama y desde entonces lo ha convertido en su outfit diario. Un Youtuber habla de este caso y dice que el jefe le dijo que venía en pijama y que se arreglara un poco porque estaba dando mala imagen. Al igual que ella lo comenzaron a hacer 140 millones de personas más. La tendencia consiste en vestirse con el pijama y cuanto más llamativo y feo sea, mejor.
Las redes sociales chinas están llenas de estos ejemplos: un pijama de felpa con un corazón en medio, el ‘skijama’, un pijama combinado con camisa de leñador y bolsa de publicidad; o el conjunto estilo cebolla, cuantas más capas mejor. El color preferido es el rosa con infinidad de estampados.
Los jóvenes afirman que van en pijama para revelarse contra los sueldos y las condiciones laborales en China. Este movimiento ya ha traspasado fronteras, algunas empresas ya han instaurado el Día del Pijama. Los hombres suelen tener que utilizar camisas o chaquetas con cuello y las mujeres vestidos con escote alto o trajes de negocios.
Según recoge 20 Minutos, esta reivindicación ha llegado también a los profesionales del diseño. Cindy Luo, una diseñadora de interiores de Wuhan (China) reconoce no estar de acuerdo en gastar mucho dinero en ropa para la oficina. Añade que solo quiere usar lo que quiera, porque considera que no vale la pena gastar dinero en vestirse para el trabajo porque solo está sentada.
Según El Confidencial, varias redes sociales se han convertido en la ventana de esta tendencia. Algunas de ellas son Xiaohongshu y Douyin, en las que se puede ver cómo están difuminando las fronteras entre la vida privada y la profesional. Todo esto forma parte del movimiento “tang ping” (acostarse plano), el cual busca promover el rechazo al acelerado ritmo de vida que las anteriores generaciones han impuesto.
Xiao Xueping, psicólogo en Beijing (China), comenta que este fenómeno es el “progreso de los tiempos”. No es un movimiento que solo defienda una vida laboral más tranquila, también cuestiona los desafíos socioeconómicos actuales, como la disminución y escasez de oportunidades laborales.
Esta tendencia a utilizar el pijama como atuendo laboral entre los jóvenes de China, no es solo un desafío a las normas vigentes, también busca la reconsideración global de los valores profesionales y personales de nuestro siglo. Este movimiento pretende alcanzar un equilibrio más humano y realista en el trabajo, pero además es un cambio cultural profundo.