La retirada del ejercito ucraniano de la ciudad de Advidka hace una semana le ha dado a Rusia una de sus mayores victorias en esta guerra. La toma de ese enclave se ha llevado por delante de vida de soldados del frente ucraniano. Uno de ellos es Maximiliano, un tinerfeño de origen venezolano que combatía como voluntario. Su madre pide al gobierno español que la ayude en la repatriación del cuerpo de su hijo.
El martes 13 de febrero la hija de Jacqueline le dio la peor de las noticias: su hijo Maximiliano, de 32 años, murió como voluntario de la guerra de Ucrania. La toma rusa la ciudad de Advidka terminó con la vida de este soldado tinerfeño.
Maximiliano partió a Ucrania sin avisar, envió un mensaje a sus familiares al que su madre solo pudo responder: "Hagas lo que hagas yo te quiero de regreso". Pero Maximiliano no volvió y ahora Jacqueline mueve cielo y tierra para recuperar el cuerpo de su hijo.