El beso de Luis Rubiales a Jenni Hermoso sembró la polémica en la celebración del triunfo de la selección española de fútbol femenino en Australia. El presidente de la Federación Española de Fútbol, saludó con euforia a todas las jugadoras, y a Jenni Hermoso le dio un largo abrazo y posteriormente un beso en la boca.
Este hecho fue denunciado por la jugadora y se generó una gran revuelta social contra él, condenando su acto. Jenni Hermoso hoy se sentaba ante el juez para declarar todo lo que pasó y cómo se sintió tras el acto de Luis Rubiales.
"Fue muy efusivo y yo no pude reaccionar en ningún momento, fueron milésimas de segundo", comenzaba expresando la jugadora a la Fiscal que le realizaba las preguntas. Sobre cómo se sintió en ese momento, Jenni Hermoso respondía: "Sentí que estaba fuera de lugar, me di cuenta que me estaba besando mi jefe y solo no suele ocurrir o no debe de ocurrir en ningún ámbito".
Por otro lado, la letrada le planteaba, si sintió violentada su integridad sexual, y la jugadora contestaba de manera clara: "Me sentí poco respetada. Creo que fue un momento que manchó uno de los días más felices de mi vida. Para mí es muy importante decir que en ningún momento busqué ese acto y mucho menos me lo esperé. Sentí rechazo a esa conducta".
Respecto a lo que le dijo Luis Rubiales a la jugadora tras el beso, Jenni Hermoso relataba: "Él me dijo que se estaba hablando mucho por redes, que se estaba liando y que se podía parar ya de alguna manera, pero yo le respondí: "te va a caer porque sabes que esto no está bien, sabes lo que ha pasado". Ante esta respuesta, ella comenta que Rubiales le quita importancia y echa toda la culpa a la efusividad del momento.