Localizada en la base aérea de Talavera la Real, en Badajoz, se encuentra la 'Escuela de Caza y Ataque' (Escuadrones 231 y 232) y el 233 escuadrón, que es donde se agrupan los cuatro MQ-9 B Predator con los que cuenta España.
Técnicamente se les conoce como RPAS (del inglés Remotely Piloted Aircraft System), que significa sistema de aeronaves pilotadas a distancia aunque popularmente se les engloba dentro de los drones.
En la base nos recibe su coronel jefe Antonio Luis Esteban Muñoz, quien nos señala que, pese a las ventajas que tienen los aviones no tripulados, los pilotos seguirán existiendo. De hecho, los únicos capacitados para llevar un MQ-9 B son los aviadores de caza.
El teniente coronel Fernando Contreras, jefe del grupo de los Predator B, nos ensaña todos los rincones para entender cómo funciona una de las armas más avanzadas del Ejército. Una de las sorpresas es descubrir desde dónde se dirigen las aeronaves y las dificultades que entraña su vuelo.