Juan Carlos Cueto es la persona que, según el juez, controlaba en la sombra Soluciones de Gestión, la empresa que consiguió las mascarillas del caso Koldo. Cueto ha declarado hoy ante el juez y, después, el magistrado ha emitido un auto en el que le prohíbe salir del país sin permiso previo. En Noticias Cuatro desgranamos las claves del auto.
El auto del juez Ismael Moreno consta de 28 páginas en las que el magistrado insiste en los indicios de delitos de corrupción. Según nos explica Isabel Sanz, el documento da por acreditado que Koldo García disponía de billetes de 500 euros para sus gastos diarios, “pone como ejemplo el pago de una mariscada en un restaurante de Madrid con uno de esos billetes” o también “una conversación donde le pide dinero en metálico a un empresario”, la cual está grabada en las conversaciones que registraron los agentes durante la investigación.
El magistrado destaca que utilizaba a sus familiares como testaferros y destaca la existencia de una caja fuerte “de la que sabían Koldo y su mujer”. El juez explica que ella sacó dinero y se lo contó a su marido pero no sabían que en ese momento estaban siendo grabados por la policía.
De las llamadas grabadas por los investigadores, el juez saca otras conclusiones, como por ejemplo que Víctor Aldama, tenía "un pase especial" en el ministerio de Transportes. “Víctor Aldama, recordamos, es el presidente del Zamora Club de fútbol, que fue asesor de Aena y al que los otros empresarios de la presunta trama se referían como ‘el comisionista’”.
Sobre Juan Carlos Cueto, el auto dice que “era quien realmente estaba detrás de la empresa Soluciones de Gestión, la que proporcionó las mascarillas”. Además, afirma que “tuvo un papel dirigente en la génesis y en la ejecución de los contratos”. En cambio, en su declaración Cueto ha asegurado que no hubo nada ilegal, que los beneficios fueron ajustados, que la operación le costó mucho dinero a la empresa y que fue casi un acto altruista por una España que estaba sufriendo.