Acceder a la compra de una vivienda es una misión imposible para los jóvenes. Una de esas barreras es la dificultad de aportar la entrada que nos pide el banco. A partir de ahora, el Estado avalará el 20% del precio de un piso para aquellos que sus ingresos sean inferiores a los 37.800 euros al año. Muchos de los ellos ya se han mostrado desesperados por no poder adquirirla ni con esta ayuda adicional.
El Gobierno ha aprobado un plan de 2.500 millones en avales para ayudar a los jóvenes a comprarse una vivienda. Así, se ha reactivado una medida que ya anunció Pedro Sánchez en la campaña electoral de la primavera del año pasado. Los datos de la emancipación en España son preocupantes. Mientras que en nuestro país la edad media para independizarse es a los 30 años, en países como Suecia lo hacen a los 21.
Una de las limitaciones para los jóvenes es abonar la entrada de un piso a la hora de comprarlo. Con esta medida aprobada, el Gobierno no dará el dinero, pero sí facilitará acceder al crédito. Es decir, si tú quieres comprar una vivienda que vale 100.000 euros, el banco te dará como mucho 80.000. ¿Y qué pasa con el dinero restante necesario? La entidad bancaria accederá a prestártelos ahora porque cuentas con el aval del Estado, quien asume el riesgo por ti.
Con esta ayuda, los bancos también ganan. Así lo creen desde el partido ‘Sumar’, donde han criticado la iniciativa por considerar que es probanca; ya que son las entidades financieras las que siguen teniendo la decisión de prestar o no el dinero por mucho aval que tengas.
El Observatorio de la Emancipación asegura que solo el 16,7% de los jóvenes puede independizarse, lo que supone la cifra más baja registrada entre 2019 y 2021. Y el salario medio de los jóvenes, entre 16 y 29 años, ha caído más de un 5% en la última década, lo que ha generado que muchos de ellos no lleguen a ser mileuristas.
Los departamentos de riesgos señalan que una hipoteca no puede ser más del 35% de los ingresos. El problema radica en que los precios de los pisos y los ingresos de los jóvenes están muy cerca del límite en muchos lugares, tal y como advierten los expertos. En Reino Unido, donde cuentan con una medida similar desde hace 10 años, tienen unos resultados favorables en las zonas con poca tensión. En otros lugares como Londres, los precios subieron un 8%. Y es que es necesario tener en cuenta las condiciones locales del mercado de la vivienda a la hora de aplicar este tipo de medidas.