Los agricultores franceses prendieron la mecha y ahora sus protestas recorren toda Europa. En España, los tractores han tomado este martes las carreteras de hasta siete comunidades autónomas, provocando el caos. En Noticias Cuatro analizamos cuáles son sus reivindicaciones.
Las protestas de los agricultores españoles vienen arrastradas desde otros países europeos, pero no son nuevas aquí. Entre sus reivindicaciones hay tres peticiones principales: que su negocio sea rentable, es decir, que no vendan a pérdidas y que otros países no vendan más barato; más ayudas y menos exigencias de adaptación ante la sequía y el cambio climático y menos burocracia para recibir ayudas a cambio.
Por ahora, lo que han recibido es fundamentalmente dinero para compensar estas pérdidas: 4.700 millones de pagos directos de la Unión Europea y, en concreto, por la sequía 268 millones. Además de la ley de la cadena alimentaria para evitar las ventas a pérdidas. Pero los agricultores aseguran que no es suficiente y no está funcionando.
Según explica Beatriz Benayas en Noticias Cuatro, los agricultores denuncian que "hay campo echado a perder por los temporales y la sequía que amenazan su futuro, campos de remolacha, fresas, frutas y verduras secas o arrasadas por las inclemencias del clima".
El problema principal para los agricultores es que aseguran que las cuentas no les salen. Los responsables, según ellos, son la competencia de productos más baratos de otros mercados que no tienen todas esas exigencias, pero también a la sequía y el aumento de los costes, materiales, laborales y energéticos.