La Unión Europea ha avanzado qué productos podrían ser gravados con aranceles y que responden a una estrategia muy parecida a la que se adoptó en la guerra comercial del primer mandato de Donald Trump. Según informa Cristina Montalvo y Mirentxu Arroqui, la lista de los posibles damnificados que se ha presentado es larga.

De momento, parece que el objetivo son los productos que se elaboran en Estados de ciertos legisladores republicanos porque tienen un peso importante. Si se causan problemas económicos allí, estos podrían influir en Donald Trump para que se repensase la imposición de aranceles.

Los aranceles del 25% de Estados Unidos al acero y al aluminio han entrado ya en vigor. Europa responde y anuncia que va a grabar varios productos que llegan de Estados Unidos por valor de 26.000 millones de euros. Entre los productos que se verían afectados se encuentra la soja, que se cultiva en Luisana y el Estado donde procede Mike Johnson, presidente de la Cámara de Representantes.

Los funcionarios europeos ya han dicho que la Unión estará encantada de comprar la soja en otros países y hacer presión entre quienes puedan ayudar a revertir las medidas. Con esa idea, se gravarían también la carne de ternera y pollo procedente de Kansas y Nebraska o los productos agrícolas de Alabama.

Todo esto se hará durante las dos próximas semanas. El Gobierno dice que se está analizando los sectores y productos para afinar bien la respuesta a los aranceles del 25%. Las empresas americanas, asentadas en la Unión Europea, destacan que son “más severos y amplios” que los que se aplicaron en el primer mandato de Trump.

Ellos creen que el daño para ambas partes será mayor en empleo, seguridad y crecimiento. La Cámara de Comercio de Estados Unidos en Europa ha pedido una negociación urgente. Una salida negociada a la que también se ha referido en Bruselas el ministro de Industria, Jordi Hereu.

Europa anuncia que va a gravar varios productos que llegan de Estados Unidos por valor de 26.000 millones de euros, un valor muy similar a los aranceles que nos imponen desde allí. Hablamos de productos muy americanos como lo son, por ejemplo, el Bourbon , los vaqueros Levi’s o las motocicletas Harley-Davidson. Pero también lo son otros como los electrodomésticos: el cuero, las nueces o el azúcar. Son aranceles que podrían empezar a aplicarse este mismo mes.

La Comisión Europea insiste en que una guerra comercial no beneficia a nadie y que solo salen perjudicadas las empresas y los consumidores. Calculan que los aranceles de Trump provocarán que los importadores estadounidenses tengan que pagar una factura de 6.000 millones de euros. La presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, ha explicado hoy el plan desde Bruselas: “La Unión Europea debe actuar para proteger a los consumidores y a las empresas. Las contramedidas que tomamos hoy son contundentes, pero proporcionadas”. Eso sí, mantienen abierta la puerta del diálogo e incluso se muestran dispuestos a comprar más hoja y gas licuado a EE.UU.

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