El IPC desciende al 2,8% en julio debido a la bajada de los precios de la electricidad y los alimentos

El Índice de Precios de Consumo (IPC) bajó un 0,5% en julio en relación con el mes anterior y recortó seis décimas su tasa interanual, hasta el 2,8%, debido a la bajada de los precios de la electricidad y de los alimentos, según los datos definitivos publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Según informa Cristina Montalvo en el vídeo, el IPC vuelve a caer por debajo del 3% en julio, un nivel que no tocaba desde el pasado mes de febrero.

La bajada de los precios se debe, según informa el INE, a un descenso de la electricidad mayor que el del año pasado porque se ha vuelto a reducir el IVA. Además, también se explica por la evolución de los precios de los alimentos, que en julio, registraron la primera caída mensual desde el verano de 2021, los pagamos tres décimas más baratos de lo que habían estado en junio.

En tasa interanual, los alimentos siguen subiendo, pero a un ritmo muy lejos ya de los incrementos superiores al 10% que tuvimos el año pasado y casi ajustándose al ritmo de la tasa general de inflación como destacaba el ministro de Economía.

El Departamento dirigido por Carlos Cuerpo ha explicado que los datos de inflación siguen reflejando la capacidad de la economía española de compatibilizar uno de los mayores crecimientos económicos entre los principales países de la eurozona, como ponen de manifiesto los datos de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) del segundo trimestre, con la moderación de los precios.

En este sentido, el Ministerio de Economía también ha señalado que durante el mes de julio "ha seguido constatándose la progresiva bajada de la inflación de los alimentos, que, gracias a las medidas de apoyo adoptadas, está permitiendo reducir su diferencial con la general".

En esta evolución de los precios de los alimentos destaca el del aceite de oliva, que ha sido la pesadilla de los bolsillos de los consumidores en los últimos años. En los supermercados llevamos ya tres meses viendo caídas en el precio del aceite de oliva. La del mes de julio ha sido la más pronunciada, ya que ha descendido más de un 5% mensual porque ha entrado en vigor la eliminación del IVA que aprobó el Gobierno y que en principio se prolonga hasta finales de septiembre. Aun así, si lo comparamos con el año pasado el aceite de oliva acumula una subida del 38%.

La evolución de los precios del aceite es una incógnita y dependerá de lo que pase con la próxima cosecha, porque estos años de subida se deben a que la producción se ha reducido a la mitad. Los responsables del aceite de la organización agraria UPA han explicado a Noticias Cuatro que este año el campo tiene otra cara, que las lluvias y las temperaturas de la primavera han permitido que se haya producido una buena floración y dicen que si el otoño es lluvioso se podrá conseguir de nuevo una cosecha en valores habituales, lo que serviría para normalizar los precios.

Con el descenso del IPC interanual en el séptimo mes del año, la inflación encadena dos meses consecutivos de descensos después de las subidas experimentadas en marzo, abril y mayo. El descenso de julio sitúa la inflación en su nivel más bajo desde el pasado mes de febrero, cuando el IPC se situó también en el 2,8%.

La inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) igualó en julio la tasa general del IPC, un 2,8%, tras ceder dos décimas respecto a junio, registrando la menor tasa desde enero de 2022. En términos mensuales (julio sobre junio), el IPC se contrajo cinco décimas tras seis meses consecutivos de subidas.

En el séptimo mes del año, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) situó su tasa interanual en el 2,9%, siete décimas menos que en junio. Por su parte, la variación mensual del IPCA fue del -0,7%.

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