Las cifras corroboran que estamos ante el mejor momento de la música en vivo en España. Según informa Hugo Domínguez en Noticias Cuatro, nunca había asistido tanta gente a espectáculos musicales en un año. Esto ha dejado una facturación récord, ya que tras la pandemia se ha generado un efecto rebote, es más fácil acceder a la música y son muchos los que han convertido los conciertos en un plan de ocio, como ha ocurrido con las cuatro fechas de Karol G en España.
Este 2023 se han generado ingresos de 578 millones de euros (26% más que en 2022), mientras que en 2014 los ingresos generados fueron de 173 millones de euros. Estamos viendo menos conciertos, pero en recintos más grandes. La música prioriza grandes eventos, con estadios con entradas agotadas en pocas horas y ampliaciones de fechas.
Estamos viendo como esos grandes recintos han dejado de ser monopolio de las megaestrellas internacionales. Por ejemplo, hace unos días Estopa hizo historia reuniendo a 60.000 personas en Montjuïc, en Barcelona. Se convierten en los primeros artistas españoles en llenar un Estadio Olímpico de Montjuïc. Otro ejemplo es el nuevo Santiago Bernabéu con los conciertos de Taylor Swift, Duki o Karol G.
Esta fiebre por acudir a grandes eventos suceden por varias razones. Una de ellas es por el efecto rebote de la pandemia. Después de las prohibiciones, la gente quería hacer planes y esto se ha convertido en un plan de ocio más. Así, el servicio de streaming hace más fácil acceder a la música, que te enganches a un artista y luego quieras ir a un concierto. Esta situación, en la que hay más personas yendo a los conciertos, ha provocado que las entradas sean más caras: un 38% más que hace un año. Uno de los ejemplos lo vemos con Karol G, cuyo precio de media era de 100 euros.
A pesar de este incremento, las entradas se gastan antes. La cantante colombiana vendió en cinco minutos los dos primeros conciertos y luego tuvo que sacar dos fechas más. Los artistas ya no solo llenan estadios, sino que lo hacen por varios días, como también sucedió con 'Coldplay'. El informe ‘Impacto económico en la industria de la música en directo’ de la OBS Business School prevé un crecimiento sostenido para el sector en los próximos años, aunque el consumo de la música en streaming se está consolidando como alternativa más económica para acceder a estos eventos.
Barcelona tuvo una facturación de 132 millones de euros, un 26% de la facturación neta total. Esto ha hecho que desbanque a Madrid en 2023 por primera vez, ya que ha ingresado 94 millones de euros un 16% de la facturación total. Tras estas ciudades, las que más facturación han tenido han sido Málaga y Sevilla.
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