En ‘La muerte de la verdad en democracia’ (Villa de Indianos), el ensayista y periodista Pedro Silverio analiza la relación entre la crisis de la democracia representativa liberal y la crisis de los medios de comunicación para determinar el grado de incidencia entre una y otra.
“La crisis de los medios y de la democracia están relacionadas -afirma Silverio-, pero no está en crisis la libertad de expresión, sino el debate público. Lo que ocurre ahora es que al elector le da igual lo que opine el adversario. Él solo va a votar a los suyos porque son suyos”.
El trabajo de Pedro Silverio se estructura en tres partes. En la primera parte se realiza una aproximación al concepto de democracia. “Tenemos que replantearnos la democracia. Hay que tratar de premiar al pacto, el acuerdo y el consenso. Ahora tenemos la participación reducida a las citas electorales”, opina Silverio.
“Se respetan las reglas, pero se compite de una forma que se lleva al extremo. No elegimos al mejor gobernante, sino al mejor competidor. No queremos que gobierne el mejor, sino el nuestro”, apostilla.
En la segunda parte del ensayo, se ahonda en la libertad de expresión y la configuración de la opinión pública. “Nos creemos los bulos que nos cuentan. Además, ahora no sabemos si son información u opiniones”, alerta el ensayista.
La tercera y última parte de la investigación abre una puerta al optimismo. Se propone una vuelta a los orígenes del sistema democrático aumentando la cuota de participación ciudadana. Y también se pide la adopción del sorteo como método para combatir los efectos de la desinformación y la polarización que tanto dificultan el diálogo en nuestras sociedades actuales.