Una vez más ha ocurrido, las autoridades del Congo paran a José Antonio y a su equipo mientras se dirigían a comprar unos plátanos a un mercado de la región. Y una vez más les han pedido dinero sino se quedaban sin el coche. Les pide la documentación del vehículo y les dice que salgan porque han cometido una infracción, el aventurero les intenta convencer de que solo van de compras: “Nos cierran el mercado”, les dice José Antonio. Pero no hay manera quieren que les paguen. Pero a José Antonio se le ocurre fingir un paro cardiaco y un ataque de nervios…