En el programa anterior, Efrén eligió a Ana después de casi cinco meses en el trono, pero como en todas las finales está la otra cara de la final, la de las personas que no son elegidas. Ter se debatió en duelo con Ana, pero no pudo ser. Su madre fue la que peor lo pasó por su hija, se tuvo que salir del plató porque se agobió. La pretendienta ha entrado para despedirse de la pareja y le ha dedicado estas palabras: “No te voy hablar solo a ti sino a los dos, espero de corazón que le hagas el hombre más feliz del mundo. Que estéis a la altura el uno del otro y que de verdad seáis felices, por favor”.