En el programa anterior vimos como Oriana pedía perdón a Suhaila por haberle dado un agarrón del brazo y haber perdido los nervios, pero parece que la tronista solo se arrepintió de su comportamiento agresivo y no se olvidó de lo mal que se lleva con su compañera de trono.

Tras escuchar a Suhaila y a Dani hablar de ella en una cita, Oriana ha aprovechado para explicar que sigue manteniendo que “Suhaila es mala persona” y que no está dispuesta a cambiar de opinión. Suhaila le ha explicado que habían hablado de ella porque Dani le había contado que le había dicho que tenía a una tronista muy mala. La tensión se ha vuelto a apoderar del plató y las tronistas han intercambiado sus respectivas interpretaciones de lo que es una mala persona. Para Suhaila mala persona es la que insulta a Carla por Twitter y para Oriana la que se ríe de otra cuando ésta está llorando.

En medio de este cruce de acusaciones, Suhaila ha tocado a Oriana en el hombro para intentar que le escuchara y Oriana ha empezado a gritar: “Me está tocando, me está tocando”, con clara intención de acusar a Suhaila de lo que le habían acusado a ella unos minutos antes, de agresión. Emma le ha explicado que ella lo había visto todo y que la forma en la que Suhaila le había tocado no tenía nada que ver con lo que había hecho ella antes. Oriana estaba indignada.

En mitad de este lío, Suhaila ha intentado explicar que ella no quería hablar de Oriana en sus citas, pero que el equipo le había pedido que hablaran de lo que había pasado en plató. “Qué triste que te tengan que dar temas de conversación. Yo cuando estoy con un chico que me gusta no me quedo sin palabras”, ha asegurado Oriana. Está convencida de que Suhaila no tiene ni temas de conversación y que necesita que los demás le digan de que tiene que hablar con sus chicos porque no le gusta ninguno.

Suhaila ha asegurado una vez más, que de momento no hay ningún pretendiente que le guste demasiado y que ella nunca lo ha negado. La madre de Oriana no quería criticar a Suhaila, pero ha comentado que ella es seguidora del programa y que Suhaila aprovecha todas sus citas para criticar a su hija, cuando a su hija le brillan los ojos de la ilusión que tiene por sus pretendientes. Suhaila no se ha quedado callada y ha asegurado que a Oriana le brillan los ojos sobre todo cuando mira a Juanma.

Cuando parecía que este nuevo asalto había terminado porque Emma no encontraba la solución para hacer que las tronista no volvieran a enzarzarse, Kiko ha entrado en plató y se ha vuelto a liar. El ex pretendiente de Gala quiere conocer a Suhaila y vivir una nueva aventura en el programa. “Te lo pido por favor, yo no puedo estar aquí con ella hablando por lo bajo todo el rato”, ha asegurado Suhaila. Y es que Oriana no paraba de criticar la actitud de la tronista mientras ella intentaba prestar atención a Kiko. Oriana se ha defendido argumentando que estaba haciendo lo mismo que hace Suhaila con ella y a Emma se le ha ocurrido una magnífica idea para impedir que las tronistas se tengan que aguantar la una a la otra.

Emma ha propuesto que cuando sea el turno de Suhaila a Oriana se le pongan unos cascos con música muy alta y viceversa. Así será a ellas a las que se les ponga dolor de cabeza y no a los espectadores.