La relación de Melyssa y Tom avanza a pasos agigantados. La química entre ellos siempre ha sido muy fuerte y el pretendiente lleva todo el trono siendo uno de sus favoritos. Después de que Melyssa le echase en cara que le molesta que se lo tenga tan creído, el pretendiente ha decidido quitarle hierro al asunto y relajarse con un masaje de lo más sensual.