Está contenta, feliz, más tranquila... y encima puede estar con Rubén 24 horas al día. ¿Qué más se puede pedir? Pues tener una cita con su tronista. "Por fin vas a conocerme de verdad", le ha dicho muy emocionada la pretendienta mientras daban una vuelta por el jardín, "y tú a mí", le ha respondido Rubén. "Si ahora te digo una cita sin testigos...", le ha propuesto el tronista, a ella no hacía falta que se lo preguntara. Y la pareja se fue a echar la siesta a la habitación de arriba.
Tras una hora sin cámaras, a la pareja se les hizo muy corto este tiempo, querían más. Sandra le ha encantado el detalle que ha tenido con ella al regalarla su camiseta, ahora se la va a poner todos los días.