La cita sin cámaras de Jenni y Martí no ha empezado como ellos esperaban. La tronista cuando ha llegado se ha encontrado con un pretendiente muy serio y sin ganas de nada. Estaba así porque no le ha gustado nada que Jenni dudara de él por el sobre rojo, de hecho le ha sentado fatal. Además le ha vuelto a reprochar que sigan entrando chicos: “No sé hasta qué punto voy a aguantar”, le ha dicho. La tronista le ha pedido que se moleste más en conquistarla para que le elija y se vaya con él, y no tanto en reprocharle cosas. “¡Qué presión! Es que ya estoy cansada, siempre lo mismo. Podéis parar de atacarme todo el mundo, que yo también tengo una presión increíble”, le ha dicho entre lágrimas.
Mientras estaban viendo la primera parte de la cita, Jenni en plató se ha derrumbado. Martí le ha querido explicar que lleva ya cuatro meses, “y las cosas cada vez me duelen más”, ha asegurado. Lo que ha querido que entendiera su tronista es que está desubicado, se ha ido gente como Josua, Miguel… y ahora ha entrado nuevos chicos, y no sabe en qué punto está Jenni con él: “Cada vez que entra alguien nuevo, me fastidia mucho”, además le da mucho coraje que se bese con otro. Está en un momento en el que todo le duele, “la veo así y también me pongo mal”, ha asegurado, y se ha derrumbado.
Toñi Moreno ha apuntado que no entendía muy bien lo que estaba pasando en plató porque lo que sucedió en la segunda parte de la cita sin cámaras no tenía nada que ver con lo que estaba ocurriendo en ese momento en el programa. Si en plató estaban llorando, en el encuentro estaban mejor que nunca (eso sí después de la discusión que tuvieron al principio), la pareja se reconcilió y estuvieron más cariñosos que nunca.