Iván estaba bastante de bajón en el trono de Nerea pero cuando la tronista le ha dicho que le daba la cita sin testigos se ha puesto de lo más contento con esta decisión. A los que le llaman calculador, el pretendiente contesta que él no es perfecto, tiene muchos defectos pero no lo tiene todo bajo control. Le pueden poner de orgulloso, cabezón… pero no “mala persona”, como les están tachando.
“¿Qué esperas de esta cita sin cámaras?”, le ha preguntado Nerea, “no lo sé, me dejo llevar”, le ha contestado su pretendiente. Tras estar un rato sin cámaras, los dos estaban muy contentos, y como se habían quedado con ganas de más la tronista le ha propuesto quedarse a dormir.