Los lazos amarillos que los Blancafort llevan en sus solapas se han hecho notar desde el principio: "Yo soy independentista, me siento encantado si se fijan en el lazo, eso es que piensan". Esta ideología ha hecho que surjan las primeras ampollas entre los trabajadores del bar de los Castaño y la familia catalana: "¿Por qué te quieres independizar?", algo a lo que Jordi contestaba sin titubear: "Yo me quiero independizar de un gobierno que juega con todos, no hay pan para tanto chorizo".