Por muchos consejos recibidos de Mónica del Raval, a Duna no se le han quitado los nervios ante la actuación que su amigo Evans le había conseguido. Una profunda afonía no ha ayudado en su agobio y finalmente, aunque el apoyo de Evans le ha servido para salir al escenario Duna no ha terminado la canción y ha salido corriendo del escenario.