Tanta boda balinesa lleva Raquel a tomar una inesperada decisión: quiere casarse con Carlos en un país tan exótico. Como no todo iba a ser perfecto, tendrán que correr para organizar el evento, el viaje de novios y hasta una despedida de soltera. Aunque en el templo les dicen que es imposible casarse de un día para otro porque está todo ocupado, las Salazar utilizan una camiseta del Atlético de Madrid para 'chantajear' al balinés.