Serafín, padre de dos niñas, nos explicaba que participo en una concentración para la negociación del convenio de mercancerías de Pontevedra: "Estamos 70 o 80 personas y a mí me identificaron, primero me pusieron un delito por unas pedradas del que quedé absuelto porque no había pruebas pero me dejaron el delito contra el derecho de los trabajadores".