Puigdemont no ha contestado a la pregunta del Gobierno sobre su declaración de independencia, pero sí le ha explicado al Gobierno su postura en una carta que ha precipitado la aplicación del Art. 155 de la Constitución. Una carta en la que exponía términos como estos: “Finalmente, si el Gobierno del Estado persiste en impedir el diálogo y continuar la represión, el Parlament de Cataluña, podrá proceder, si lo estima oportuno, a votar la declaración formal de la independencia que no votó el 10 de Octubre”.