El detonante de la crisis de la Agencia Tributaria es el cese de una inspectora por cobrar una multa de 400 millones a Cemex, una cementera. Tras esto, se ha producido una ola de dimisiones que la Agencia Tributaria ha intentado silenciar. En solo dos años, Cristóbal Montoro ha relevado a 310 cargos en la Agencia Tributaria. Lo inspectores señalan al ministerio de Montoro por endurecer el control político.