En su última versión, Carcaño ha afirmado que escondieron el cuerpo de Marta del Castillo en una finca del paraje de La Rinconada y, allí, lo cubrieron con cal viva. Los agentes hicieron zanjas en el lugar, pero no encontraron nada pero, ahora Carcaño señala lugares más concretos y lleva a los agentes a iniciar una nueva búsqueda del cuerpo.