Hoy, en Iumiuky, os descubrimos tres obstáculos muy especiales en el Agility. los obstáculos de zona de contacto. Para ello contamos con Diana Valero Vasseur, del Club Agility Deporcan. Estos obstáculos son el balancín, la pasarela y la empalizada, que cuentan con dos colores que los perros, tanto al subir como al bajar, tienen que tocar. No pueden saltarse estas zonas.
En el balancín, el perro tiene que ir corriendo hasta el final, dejar que baje el balancín y seguir corriendo. En la pasarela, tienen que hacer lo mismo, a toda velocidad, entrar, correr la pasarela sin caerse y bajar tocando la zona de contacto para continuar con el siguiente obstáculo. Por su parte, en la empalizada, tienen que hacer lo mismo, entrar, correr, no saltarse el pico de esta y bajar tocando la zona de contacto para poder seguir al siguiente obstáculo.
Una cosa muy especial de las zonas de contacto es que a diferencia de los saltos, todos los perros la hacen a la misma altura. Cómo lo hagan no depende de la altura del perro. Si os animáis a practicar Agility y empezáis con las zonas de contacto, hay que tener mucho cuidado porque pueden ser un poco más agresivas, pero a ellos les encanta.
¿Sabéis si a vuestro perro le viene bien o le viene mal los productos de limpieza bucal? Nos lo cuenta Andrés Santiago, veterinario, en su consulta.
En general, cualquier tipo de premio que por fricción mecánica limpie en mayor o menor medida la placa bacteriana será útil, con la contraindicación de que aporta calorías innecesarias y en perros con sobrepeso habrá que tenerlo en cuenta. Santiago recomienda mucho las pastas de dientes específicas de digestión enzimática, siempre que al perro le parezca bien que le lavéis los dientes.
En peluquería canina, Nicolás Herrero nos explica cómo es el corte asiático de la mano de Dina, un bichón maltés que visita la peluquería mensualmente.
Un corte de estilo asiático o de inspiración asiática, son cortes que tienen un común denominador. Aunque cada profesional evidentemente los lleva a la práctica de una forma diferente, habitualmente suelen llevar el pelo de la cabeza recogido y las orejas relativamente largas para darles continuidad al pelo del cráneo. El morro suele ir muy redondo, el cuerpo suele ir muy corto, realmente va rasurado en los cortes originales y las patas van totalmente largas.
Nicolás Herrero lleva este corte a la práctica de una forma un poco más saludable para la piel y para el pelo. Aunque le dan esa misma inspiración y les gusta realmente ese aire porque es muy dulce, trabajan la cabeza de una forma similar, dándole forma redonda a la parte de lo hocico (porque no tiene ninguna contraindicación para la salud del perro) pero cortan el pelo del cuerpo con tijera, respetando unos largos sanos para la piel. Además, le dan una pata con un poco más de protagonismo, más ancha, trabajada en los largos para que sea higiénico y sea práctico para sus propietarios y la imagen, aunque es realmente similar, es un corte un poco menos agresivo.
El corte asiático original rasura hasta la piel del animal y puede dañarla en exceso. De esta manera sigue siendo exótico y estético, pero no compromete la salud ni de su pelo ni de su piel. Es recomendable, a su vez, cepillar a diario, si tenéis un bichón maltés como Dina o una raza similar y acudir con frecuencia a vuestro profesional para que os asesore sobre su arreglo y mantenimiento.