Por fin, la Agencia Europea del Medicamento ha aprobado la vacuna de AstraZeneca que, en España, finalmente, no será administrada a los mayores de 80 años por las dudas sobre su eficacia en este sector de la población. Además, España ya se está planteando la posibilidad de adquirir la vacuna rusa, la Sputnik V, si es aprobada por Bruselas en los próximos días.
La vacuna de AstraZeneca y la Sputnik V son similares, fabricadas en base al adenavirus 26, y ambas, como el resto de las que se están comercializando a nivel mundial, evitarían el desarrollo de la enfermedad en nuestro organismo, pero no su transmisión o, por lo menos, con la misma efectividad.
El doctor Carballo ha dicho en Horizonte que, según su estimación, la única vacuna que impedirá tanto la transmisión del virus como su desarrollo celular será la vacuna española; por tanto, ésta podrá ser una “moneda de oro de cambio para obtener entre 8 y 10 millones de dosis de la vacuna rusa, con los que sí se cumpliría el plan de vacunación antes de verano”.
La vacuna española, que va a un ritmo mucho más lento porque está siendo desarrollada por un miembro del CSIC jubilado y otras 10 personas sin contrato fijo, está dando unos excelentes resultados. Ya ha presentado el 100% de eficacia en los ensayos con ratones y la calve de su éxito es que está compuesta por tres tipos de anticuerpos: TH1, anticuerpos neutralizantes y los llamados linfocitos (o células) T.