Este jueves 5 de mayo Iker Jiménez ha contado con una mesa de expertos en ciberseguridad para analizar todo lo que ha sucedido con el escándalo del espionaje al Gobierno de España con el programa Pegasus.
El presentador ha reflexionado sobre lo fácil que es (o parece) hackear el teléfono móvil de un presidente y también de una ministra. Pero Carmen Porter no tiene tan claro que eso sea así tras hablar con Manuel Huerta, experto en ciberseguridad.
Hay que partir de la premisa de que esos teléfonos están blindados y casi es imposible acceder a ellos, "detrás de toda la tecnología utilizada por cualquier persona relevante del gobierno, tienen equipos e identidades que se encargan de 'securizar', supervisar... Además se le dota de un montón de capas de seguridad", ha explicado.
"Se está planteando la opción de que evidentemente alguien en los cuerpos de seguridad del Estado, ya sea CNI o CCN, haya hecho algo mal y que se tenga que ir a por ellos. Aquí es donde empieza a chirriar porque hay expertos fuera de esos entornos, como los que estamos aquí y muchos otros que hay buenísimos en España, que escuchamos las declaraciones, lo vemos y dices, esto hace aguas", ha sentenciado.
Tras esta reflexión el experto ha querido dar datos para que esto no quedara en una percepción, “España tiene licencia de Pegasus, sabe cómo funciona, sabe qué marcas deja y sabe cómo se infecta. Evidentemente lo primero que haces es blindarte contra esa herramienta", ha apuntado.
"Si tú estás metido en la guerra electrónica, todos los estados ya tienen departamentos de guerra electrónica y este es uno de ellos... Si realmente no se ha aplicado, a mí me cuesta muchísimo creer dentro de la experiencia que tengo que dentro de estos entornos no hayan aplicado estas medidas de seguridad al presidente", ha concluido.