Unos 2.000 migrantes subsaharianos trataron de saltar la valla de Melilla el pasado viernes 24 de junio y resultó mortífero, según las autoridades marroquíes 23 fallecieron tras intentar entrar en la ciudad.
El coronel Pedro Baños ha analizado lo que sucedió, "tiene muchas lecturas, tiene muchos flecos... La primera la parte humana, no se nos puede olvidar nunca, estamos hablando de personas, de seres humanos, que no hacen ni más ni menos que haríamos cualquiera de nosotros si estuviéramos en su misma situación y apenas estamos comenzando con esta situación", ha sentenciado.
"Hay que pensar que ahora mismo en África hay lugares que están padeciendo sequías que no conocían desde hacía 30, 50 años", ha explicado, además "todavía hay muchos países que están en guerra, aunque ahora estemos muy focalizados en Ucrania, en África también hay muchas guerras, mucha desesperación, hay mucha hambre, hay muchas personas desplazadas, muchísimas personas que han tenido que salir de su país por necesidad y por tanto para ellos el gran sueño obviamente es venir a Europa".
El coronel cree que hay que adoptar una "estrategia más allá de las ideologías" porque "apenas estamos empezando. Se estima que solamente en Nigeria probablemente en menos de 25 años habrás más habitantes que en toda la Unión Europea", ha explicado, "una parte de esa población va a intentar venir a lo que ellos consideran el paraíso".
La migración "es un fenómeno que tenemos que ponerle orden pero de una manera más allá de las ideologías porque si empezamos a discutir entre nosotros simplemente por posiciones ideológicas, no vamos a poder resolverlo nunca", ha afirmado Baños.
Tener una estrategia más allá de las políticas, pensando en "cómo satisfacer las necesidades de esas personas y también que no causen problemas en los lugares de acogida porque evidentemente esto tiene una parte económica cuando estas personas llegan hay que atenderlas y también tiene un coste".
También hay un parte geopolítica, "Marruecos, en este caso, esta jugando sus bazas: no deja de ser una presión frente a dos ciudades españolas que ha reclamado históricamente y que va a seguir reclamando como parte de su territorio", ha explicado el coronel.