Erlis tiene sangre latina: “Los españoles en la cama aguantan muy poco”
Erlis decide el final de su cita al saludar a David: “Cuando se acercó a la mesa fue pésimo, horroroso”
David, ante las decepciones sexuales de Erlis: “Soy un macho cabrito, un macho español y me tiene que probar a mí”
Erlis, a David: “Me gusta que te dejes gobernar”
Erlis ha llegado a ‘First Dates’ con pocas esperanzas en el amor y asegurando haber tenido grandes decepciones sexuales con los hombres españoles con los que ha estado “Los españoles en la cama aguantan muy poco y yo soy latina y necesito que me sigan la marcha”. Menos mal que se ha encontrado con David, un hombre que asegura ser “un macho español”.
Erlis tiene muy claro que a ella nadie la gobierna, que los hombres la tienen miedo y que casi ninguno cumple sus expectativas sexuales. Ha venido dispuesta a dejarse enamorar y a sorprender a su cita con un baile muy sexy, pero solo si susodicho se lo ganaba. Sin embargo, la cita no ha comenzado como ella esperaba y aunque ha terminado bailando, desde el primero momento ha decidido que David no era para ella: “Cuando se acercó a la mesa fue pésimo, horroroso. Encima tiene los dientes horribles y encima le huele mal la boca así que yo así no le puedo dar ni un beso”.
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Tras conocer un poquito a David, han comenzado a hablar de sexo y Erlis le ha explicado cuáles habían sido las carencias que había tenido “He perdido la esperanza, he tenido últimamente malas experiencias sexuales y será que me vuelvo lesbiana”. David ha sentido que la suerte de su cita había cambiado porque él se considera “un macho cabrito, un macho español y me tiene que probar a mí”.
Sin embargo, Erli ya no se deja impresionar por las palabras “Dice que es fogoso, pero creo que no me seguiría el ritmo. Debería mejorar la condición física para aguantarme el trote” aunque le ha gustado saber que se deja gobernar y que en las reconciliaciones se olvida todo “En el momento de la reconciliación cuando estás ahí rucu rucu no se acuerdan de nada” porque Erli no quiere hombres celosos en su vida.