Enrico, a Stanislav: “Proyectas una imagen perifericamente muy superficial pero luego eres un tío muy interesante y profundo”

  • Stanislav buscaba a un hombre culto e interesante

Stanislav es búlgaro, fue bailarín y coreógrafo y ahora se dedica a la moda. Busca a un hombre inteligente con el que se pueda hablar de varios temas, porque está cansado de hombres bellos pero sin nada en la cabeza. Cuando ha llegado su cita al restaurante, le ha bailado un poco de Chaikovski, y Enrico se ha quedado completamente impactado.

La pareja se ha dado cuenta que se pueden aportar muchas cosas, así que han quedado en desplazarse, uno a Marbella, y el otro a Valladolid para comer lechazo y tomar buenos vinos. En la decisión final, los dos han quedado encantados y van a volver a verse.