Sí, el chico que nos sorprendió con frases como “soy ninfómano” o “¿Qué pasa si me tiro un pedo en tu cara?”, ha regresado al restaurante del amor y lo ha hecho para celebrar un San Valentín muy especial con la mujer a la que enamoró en su primera cena en el restaurante. Un año después y separados por la pandemia, Carlos y Carlota han tenido su segunda cita en el mismo lugar en el que surgió la chispa.
Muy nerviosa, pero llena de ilusión, Carlota le ha contado a Carlos Sobera que Carlos y ella salieron juntos del restaurante hace más o menos un año, que pasaron un día genial y que hasta pasaron la noche juntos. Estaban felices y habían conectado de una forma espectacular. Por el trabajo de ambos, quedaron en verse el 4 de abril de 2020, pero el confinamiento lo convirtió en un deseo imposible.
Desde ese momento han estado en contacto, pero la pasión se había enfriado por completo. Una pasión que esperaba recuperar en su cena de San Valentín ya que había decidido arriesgar y sorprender a Carlos con una pregunta que no esperaba. Carlos ha llegado con un ramo de chuches para Carlota y casi más ilusión que la primera vez.
La cena ha sido muy bonita y ambos se sentían muy cómodos porque volvían a sentir mariposas, pero ya contaban con la confianza de haber hablado muchas veces. Lo que Carlos no podía esperar es que Carlota le fuera a dejar mudo. La joven le ha preparado una bonita y original sorpresa con cartulinas para hacerle una propuesta: “¿Quieres ser mi novio?”. A él le han temblado las piernas al leer la palabra novio, pero ha reaccionado a tiempo y le ha dicho que aunque el término no le gusta, sí quiere seguir conociéndola más.
Los jóvenes han retenido sus impulsos por las medidas anticovid, pero las camareras, consciente de que en el programa se toman todas las medidas sanitarias, le han animado a sellar un momento tan mágico con un beso. Ambos esperan volver a celebrar el próximo San Valentín juntos.